Las bombas de tornillo GERMAN LEGACY son muy fiables en su funcionamiento, por lo que garantizan tiempos máximos de funcionamiento en el proceso. Especialmente en el caso de la producción continua de aceite, esto es esencial para la eficiencia económica de las plantas de los clientes.

La labor de una refinería se basa en tres etapas fundamentales: separación, conversión y tratamiento. Cada función en uno de los respectivos procesos sirve para aumentar el valor del producto refinado. Tanto si se bombean fluidos de baja o alta viscosidad como a altas temperaturas de hasta 300 °C, las bombas de tornillo son la solución perfecta.

Se transportan todo tipo de hidrocarburos, betún, lodos de alquitrán, aditivos y aceites usados.

Las bombas German Legacy también pueden fabricarse con cámaras de calentamiento integradas para medios de alta viscosidad, para su uso en oleoductos de crudo o en plataformas. Suministramos diferentes modelos con una capacidad de hasta 2400 m³/h y una presión diferencial de 40 bares.

Las bombas de tornillo German Legacy tienen valores NPSH bajos y, por tanto, excelentes características de aspiración, ideales para aplicaciones en centrales eléctricas, terminales petrolíferas y parques de tanques, por ejemplo, para bombear fuelóleo pesado (HFO).